Una de las cosas que siempre me ha gustado hacer los fines de semana es visitar los tianguis, mercados populares, mercados sobre ruedas, Swap Meet, mercados de pulgas o como se les llame.
En Portland, incluida su zona metropolitana, este tipo de mercados abundan. Y uno de los más famosos es el Portland Saturday Market, que se encuentra en funciones todos los sábados y domingos desde el mes de marzo y hasta un día antes de navidad.
Te presento un álbum fotográfico de este singular mercado ambulante ubicado en el Centro Histórico de Portland, entre el Waterfront Park y la Ankeny Plaza. Lo puedes encontrar casi a la orilla del Río Willamette a la altura del Puente Burnside.
NOTA: 97214 es uno de los códigos postales del centro de Portland, escogido arbitrariamente como referencia para hacer claro que me refiero a esta ciudad del estado de Oregón.
La idea se le ocurrió a M quien más tiempo tenía en el ambiente. Como en su casa no había espacio, decidimos hacerlo en la mía. Podríamos aprovechar la sombra del techo que cubría el garage, a fin de cuentas nuestro trabajo sería en las horas que el vehículo de mi padre no necesitaba el estacionamiento.
Unas cajas en los extremos, una hoja de triply con ellas como sostén, sería nuestra mesa de trabajo. Encima, una alfombra vieja para no rayar nuestros productos. Unos barrotes delgados de madera metidos entre las cajas nos servirían de cuñas para darle rigidez y evitar movimientos que complicaran nuestra labor.
Lijas, fibra de vidrio, tapabocas, navaja, brochas y aguarrás(disolvente químico de pinturas), serían nuestras herramientas. La materia prima, tablas de surf de 10’ de largo (poco más de 3 metro), viejas, que podíamos conseguir a buen precio. Lo importante era la quilla y no presentaran golpes que hubieran filtrado agua al foam. Con todo armado estábamos listos, ya podíamos trabajar. Quedamos de iniciar un sábado, temprano. “¡Mi’jo, te habla el representante de Hong Kong!” escuche gritar a mi padre quien, por alguna extraña razón, así nombraba a M. “¡Chale chale con tu jefe!”, se quejaba tímidamente M cuando estábamos a solas.
Ese primer día de trabajo la jornada fue buena y en la tarde, descansando, platicamos los planes sobre nuestro futuro empresarial. Retomamos la conversación tocada superficialmente unas horas antes ¿qué nombre tendría nuestra marca de tablas de surf?
Como en una verdadera junta de trabajo, se vertieron muchos nombres. Tablas Ensenada, Cachanilla Surfboards, Lomalinda Surf, Watchtower Surfboards fueron algunas de las propuestas que recuerdo. T, a pesar que llegó cuando la discusión estaba muy adelantada, propuso “Rabanito Surfboards”, parodiando al tipo pelirrojo que vivía a la vuelta de mi casa- por quien no sentía mucho aprecio- y un poco también para enfatizar lo ocioso que le parecía nuestra discusión. Él prefería escuchar a Led Zeppelin y fumar. Tabaco, a esas horas.
¿Y si le ponemos SOM? dije. “¡Ni madres!” respondió M, “en todo caso Beatríz se escucha mejor…”. Y otra discusión que parecía no tener fin dio inicio. T riéndose, burlándose de nosotros, mostraba su enfado, considerando que eran niñerías nuestros argumentos.
Después de algunas horas de intenso debate acordamos por unanimidad – T incluido- llamar a nuestra marca SOMBYF. Las tres primeras letras eran las iniciales de la chaparrita de cabello largo de quien yo estaba enamorado. Las otras tres, eran las de la delgada joven rubia a quien M decía amar.
Y ya con el acuerdo sobre el nombre de los surfboards, convencidos que dentro de poco competirían con los fabricados en Hawai, nos fuimos al Parque Revolución a fumar y reírnos de las cosas por las que uno ríe cuando tienes 16 años. T para entonces, ya estaba feliz. M y yo, mucho más. Habíamos inmortalizado a esas dos chicas que nos hacían soñar. Sus nombres serían conocidos en todas las playas del mundo en las que hubiera surfos deslizándose sobre las olas.
Semanalmente Mensualmente iré registrando los libros que he leído, así como los que están en proceso de lectura. Este día 12 doy cuenta de la primera semana de 2014 o más bien del período entre el 1 y el 10 de enero: dos libros de Novela Negra y el primer capítulo del Quijote de la Mancha.
LEÍDOS
– 1280 almas, de Jim Thompson. “Yo sólo soy un sheriff del sur” declara Nick Corey, un tipo en apariencia lerdo y vago que no soporta a su mujer ni a su cuñado, cuya máxima es que sólo se detiene a un individuo cuando no hay más remedio, y eso siempre que sea un don nadie. Todos en Potts County -un lugar imaginario en la América profunda, con una población de 1280 habitantes- están convencidos de su apatía y su simplicidad. Pero pronto el lector se dará cuenta de lo astuto que es Corey. Su deseo de ser reelegido para el cargo de sheriff hace que su comportamiento no tenga límites ni conozca escrúpulos. Poco a poco, la idea de deshacerse de todos aquellos que se interpongan en su camino va tomando cuerpo. El protagonista expone en primera persona los hechos sin inmutarse, pues en su paranoia llega a creerse elegido para limpiar de escoria el lugar.
– La lealtad de los delincuentes, Toni Soler. Valencia como escenario y en plena crisis económica, donde las costumbres de una generación acomodada ya no se sostienen, Antonio Bataller, una pieza más de ese sistema en ruinas, pasa a formar parte de la fracción de la sociedad cada vez más extensa, afectada por el exceso de desocupación y de ocio obligatorio. Con la única perspectiva de dejar pasar el tiempo, a la espera de que la situación se solucione por sí sola, este joven en paro, ex directivo de una empresa inmobiliaria, y acostumbrado a un ritmo de vida acelerado y exitoso, se ve envuelto en una investigación policial por culpa de sus inseparables colegas de toda la vida. Entre drogas, sexo y engaños buscará la manera de enderezar su situación, en una lucha constante por tomar el camino correcto. Serán decisiones difíciles, inesperadas y que marcarán un antes y un después en su vida. El amor y la lealtad definirán un punto de inflexión en el que nadie desearía encontrarse nunca. De la mano del protagonista, como si de una cámara se tratase, pasaremos por la hiperrealista descripción de una sociedad actual, urbanita y cambiante en la que nacen los nuevos criminales, y descubriremos el impulso escondido que mueve a los personajes a cometer los delitos más miserables.
– Don Quijote de la Mancha, Miguel de Cervantes Saavedra. Capítulo 1. EN PROCESO:
Sartoris, de William Faulkner.
1222, de Anne Holt.
Estas participaciones solamente incluirán los datos generales de los libros, así como su sinopsis.
Este año es bueno para leer de nuevo Don Quijote de la Mancha, de Miguel de Cervantes Saavedra y voy a aprovechar la convocatoria lanzada por Laky en su blog “Libros que hay que leer“. Hoy lunes inicio su lectura. Por lo pronto yo me apunto ya que siempre es un buen momento de leer esta obra que ha sido descrita como la primera novela moderna y una de las mejores obras de la literatura universal, además de ser el libro más editado y traducido de la historia, sólo superado por la Biblia.
Las bases son simples. Para empezar, los 52 capítulos se en las 52 semanas de año, ¿fácil, que no?. El calendario de lectura del primer trimestre es el siguiente:
Del lunes 6 al 12 de enero, 1º capítulo
Del 13 al 19: 2º capítulo
Del 20 al 26: 3º capítulo
Del 27 al 2 de febrero: 4º capítulo
Del 3 al 9 de febrero: 5º capítulo
Del 10 al 16 de febrero: 6º capítulo
Del 17 al 23 de febrero: 7º capítulo
Del 24 de febrero al 2 de marzo: 8º capítulo
Del 3 al 9 de marzo: 9º capítulo
Del 10 al 16 de marzo: 10ª capítulo
Del 17 al 23 de marzo: 11º capítulo
Del 24 al 30 de marzo: 12º capítulo
Claro, la idea de Laky es que la lectura sea comentada y compartida entre los muchos participantes para hacer más emotivo y agradable el evento. Si te interesan los detalles puedes visitar el sitio de “Libros que hay que leer” (Twitter, #leemosQuijote).
Por mi parte voy a seguir el calendario propuesto y quizás me anime a hacer algunos comentarios sobre El Quijote de la mancha aquí en este blog. Ojalá te animes a leer de nuevo- o por primera vez- a Cervantes en su mejor obra.
Esta es la edición que voy a leer:
Don Quijote de la Mancha – Miguel de Cervantes Saavedra, Edición del IV Centenario. Real academia Española, Asociación de Academias de la Lengua Española. Alfaguara, 2004.
Mi objetivo para este año que recién inicia es muy simple: leer mucho y escribir más.
Publiqué en este mismo blog mis propósitos para este 2014, una lista de mis buenas intenciones en lo que a lectura y escritura se refiere. Para cumplir con mi propuesta creo contar con los elementos básicos necesarios: una buena cantidad de libros y muchas historias almacenadas en mi interior, además de algunos años de ejercicio en esto de teclear palabras en mi computadora. Esto aunado a una estimulante alegría interna y unos profundos deseos por escribir que cada vez me son más difíciles de contener.
Los libros casi todos en formato digital, lo que propicia poder leer a casi cualquier hora y en casi cualquier lugar. Ventajas de los modernos PDA- asistente digital personal. De las historias que deseo contar algunas están dibujándose en mi mente y otras más están por romper el cascarón, intentando nacer desesperadamente. Las menos iniciaron ya su transformación en palabras escritas, de esas que forman mundos mejores desde el momento en que tiene el valor de salir de su encierro.
Este cuarto día del mes de enero, me veo el 31 de diciembre de 2014 con una sonrisa en mi rostro, satisfecho por haber llegado a las meta propuesta trescientos sesenta y cinco días atrás. La mesa está servida. Los manjares se ven deliciosos, en espera ser degustados y digeridos, ansiosos por proporcionarme ese combustible interno tan necesario para vivir. Como ves todo parece perfecto. Bueno, casi perfecto, porque siempre ha de existir algún pequeño problema.
Voy a listar los libros que he leído este 2013. Para no hacer la lista muy congestionada solamente incluyo el título del libro, el nombre del autor y la editorial. Si no se especifica lo contrario, fueron leídos en formato digital.
Luego presentaré mis comentarios sobre los textos leídos. Sin más preámbulo te presento la lista de los 36 libros que disfruté y con gusto comparto.
Hoy es el primer día de 2014 y por no quedarme atrás voy a dejar constancia de mis propósitos para este año, que según el calendario chino es el del Caballo y según la sabiduría popular mexicana es el de los bueyes de reformas (energéticas, fiscales, políticas y las que se sigan acumulando).
En esta entrada solamente me referiré a dos de los temas importantes en mi vida: la lectura y la escritura. Les platicaré mis propósitos sobre leer y escribir y más que nada los dejo como registro de mis buenas intenciones al respecto, porque este día ando ganoso y decidido a hacer compromisos serios, de esos que ayudan a que uno sea así como culto, inteligente y muy intelectual. Total, si me olvido de lo aquí comprometido y no cumplo, al menos por algún tiempo me dará ilusión y quizás hasta impresione a alguno (o alguna) de los casi tres seguidores de mi blog. Sea pues.
LECTURA – 28 libros para 2014
Leer el Quijote – Leer la novela El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha, de Miguel de Cervantes Saavedra.
Leer al menos 15 novelas del género negro-criminal – Soy aficionado a la novela negra y criminal desde hace muchos años y tengo en mi colección de libros un gran número de ejemplares de este género. El compromiso es leer autores de diversas partes del mundo, en especial los escritos en la península Ibérica y Latino América. Y claro, los clásicos del género, en particular los de autores anglosajones.
12 libros, 12 meses – Aquí mi intención es leer novela de ficción, ensayo, cuento y crónica. Me interesa leer a los ganadores del Premio Nobel de Literatura y algunos clásicos. Algunas de las crónicas que relatan el estado social y político actual de América Latina en general y de México en particular. Y algunos ensayos sobre el impacto de las nuevas tecnologías de la información en nuestras vidas.
ESCRITURA
1. Publicar frecuentemente en la blogósfera – Hacer uso del blog como medio para dejar constancia de todas esas ideas y emociones que fluyen dentro de mi, de lo que hago y dejo de hacer.
2. Escribir historias – Según Ray Bradbury, si escribo una historia a la semana es casi imposible que escriba 52 malas historias seguidas en un año. Alguna de ellas valdrá la pena. Y en verdad que así lo espero.
3. Terminar de escribir mi primero novela – este es quizás mi principal reto: terminar de escribir ese libro que lleva 4 años resistiéndose a ser terminado.
Las ideas para mis lecturas no son originales. Las tome de algunos blogs en los que se invita a leer y compartir la experiencia sobre lo leído, pero yo le he añadido algunas modificaciones sobre la convocatoria original a las novela negra -criminal y a la de 12 meses-12 libros. La del Quijote si queda tal como ha sido convocada.
Estas modificaciones no son más que con el fin de adaptar estas iniciativas a mi muy particular modo de ser, sobre todo en lo referente a la solicitud de hacer una reseña a los libros leídos. A mi no se me da esto de las reseñas formales, según como publican algunos de los actuales participantes. No se como hacerlo. No tengo la formación académica para ello. Pero si me gusta leer. Siempre me ha gustado.
Lo que si puedo hacer es expresar y compartir mi vivencia como lector, mi gusto por la buena literatura, mi gozo por leer. Para mi será una gran experiencia y estoy más que dispuesto ha vivirla.
¿Ya hiciste tus propósitos literarios para este año?. Anímate. Casi estoy seguro de que vas a tener momentos inolvidables si participas de estos retos. No olvides que divertirse y pasarla bien es también parte del juego.
Para los que estén interesados en conocer más sobre las convocatorias aquí mencionadas, les dejo las referencias: